Recuerdo que cuando era pequeño por la televisión explicaban que en algunos países también esta noche era especial. Contaban como los niños estadounidenses iban de casa en casa pidiendo gominolas o como los mexicanos ponían esas estatuillas tan raras por las casas. Por aquí también teníamos nuestras propias tradiciones; ponían una versión cinematográfica de Don Juan Tenorio por la tele, alguna que otra película de miedo (y es que aquí también relacionábamos esta noche con los muertos) que solía ser Abierto hasta el amanecer y al día siguiente en todos los telenoticias hacían un reportaje en algún cementerio.
Hoy de momento no he visto nada de eso. En cambio han dicho algo así como que la venta de disfraces la noche de Halloween es mayor que los días de Carnaval y que la gente espera deseosa esta noche.
No voy a ser yo el que defienda ninguna tradición, precisamente es una palabra que no me gusta mucho. Pero de ahí a que nos las vengan a imponer otros, no sé yo…
...¡ah! y a partir del martes, ya será Navidad en El Corte Inglés. No os quedéis atrás.